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5 consejos para reformar tu hogar y adaptarlo al ahorro energético

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Salvar el planeta es urgente, no hay una Tierra alternativa así que ciudadanos de todo el mundo se han puesto manos a la obra para reducir el uso de plásticos, las emisiones de Co2, dejar de contaminar los mares y ríos y conservar los ecosistemas. No es una tarea fácil pero sí necesaria si queremos continuar habitando este planeta. Una de las medidas más eficaces y fáciles de llevar a cabo es practicar el ahorro energético. En las viviendas nuevas es muy fácil; las diferentes normativas ya obligan a conceder certificaciones de eficiencia y se construyen pensando en el medio ambiente. También los nuevos electrodomésticos que compramos son cada vez más eficientes. La cosa cambia para todos aquellos que viven en edificios antiguos o pisos de alquiler con electrodomésticos viejos. ¿Qué se puede hacer? Te damos 5 consejos para que cuando termine la cuarentena puedas reformar tu hogar y adaptarlo al ahorro energético.

Trucos para reformar tu hogar, adaptarlo al ahorro energético y hacerlo más eficiente

Las reformas para convertir tu hogar en un espacio más eficiente te supondrán un gasto grande de inicio, pero este dinero los podrás amortizar rápidamente, ya que consumirás menos energía y cuidarás del planeta. ¿Qué conseguiremos?

  1. Disminuir el uso de energía.
  2. Ahorrar dinero.
  3. Conservar una buena temperatura en el hogar sin incrementar el gasto.

Apunta estos trucos para conseguir que con pequeñas reformas del hogar lo hagas más eficiente:

  1. Calefacción por suelo radiante.
  2. Baterías para el hogar.
  3. Placas solares.
  4. Calderas eficientes y de pellets.
  5. Aislamiento térmico (buena calidad de ventanas y que estén muy aisladas).

Con todos estos consejos conseguirás ahorrar dinero y energía. Para complementar las obras es recomendable hacer un uso adecuado del agua por no derrochar y no dejar encendidas las luces y los electrodomésticos.

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¿Por qué el coronavirus hará que paguemos más en la próxima factura de la luz?

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La demanda de energía eléctrica en España ha caído un 16% durante las dos primeras semanas de cuarentena según la comercializadora Kipin Energy que se ha basado en datos de la Red Eléctrica Española para hacer su estudio. El parón en la actividad de la mayor parte de las empresas que no pertenecen a los servicios esenciales ha hecho que se note este descenso. De todos modos, desde el comparador Selectra advierten que los hogares pagarán más en la próxima factura de la luz (aquí puedes ver los datos desgranados). ¿Por qué? Te explicamos cuál es el motivo que hará que el coronavirus nos obligue a rascarnos el bolsillo.

El Estado de Alarma y el coronavirus comportará un incremento en la factura de la luz

La gran mayoría de la población se pasa las 24 horas del día en sus casas, esto implica que a excepción de las horas de sueño, el consumo eléctrico sea mayor que antes de la cuarentena. Se prevé que el coste pueda dispararse hasta un 50% más y estos son los motivos principales:

  1. Más ciudadanos haciendo teletrabajo implica más horas de ordenadores y otros dispositivos electrónicos en funcionamiento en los hogares.
  2. La jornada laboral de 8 horas tiene lugar en la vivienda, todo ese tiempo se usan las luces.
  3. Todas las comidas se hacen en casa, esto implica un incremento en el uso de la electricidad y el gas (vitrocerámicas, cocinas a gas, microondas…).

Selectra calcula que la factura media de una familia de 4 personas (2 adultos y 2 niños) con un consumo anual de 3.500 kilovatios es de 54 euros, después del encierro esta cifra aumentará hasta los 80 euros. Esto significa que la subida en el gasto medio por persona se sitúa en los 25,72 euros.

Es cierto que hoy por hoy, la mayor parte de los gastos de un hogar se concentran en la alimentación, hipotecas y alquileres, luz, agua, gas e internet. Así que en previsión del incremento en el pago de los suministros te recomendamos practicar el ahorro energético. En este artículo tienes algunos consejos.

electrodomésticos hogar

5 alternativas al uso de electrodomésticos cotidianos para practicar el ahorro energético

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El ahorro energético garantiza un uso adecuado de la electricidad en los hogares, algo que permite ser respetuoso con el medio ambiente y también reducir las facturas energéticas. Además, ahora que nos encontramos en plena cuesta de enero tras las fiestas de Navidad, es un buen momento para empezar a practicar el ahorro energético. Te explicamos algunas alternativas al uso de electrodomésticos cotidianos para empezar a ahorrar energía.

5 trucos para evitar el uso de algunos electrodomésticos y practicar el ahorro energético

El avance de las nuevas tecnologías ha provocado que cada vez surjan nuevos aparatos que nos facilitan la vida: robots para barrer, robots para limpiar los vidrios, aparatos para limpiar la piel del rostro… ¿Necesitamos todo esto? Las máquinas necesitan electricidad para cargarse y funcionar correctamente, pero generar esa electricidad no siempre es la mejor opción para la protección del medio ambiente. Es cierto que cada vez más se usan las energías renovables (solar, eólica…), pero también comportan alguna controversia por el impacto visual, por ejemplo, en el caso de los molinos de viento.

Siempre será mejor usar energías renovables para generar electricidad, pero también tenemos que poner de nuestra parte para reducir el consumo innecesario que hacemos.

  1. Seca tu cabello al aire libre. Los secadores de pelo son uno de los pequeños electrodomésticos que más consumen. Seguramente habrás notado que puedes tener en tu casa encendido el horno, el aire acondicionado y la lavadora y no pasa nada, pero enciendes el secador y los diferenciales saltan. Sabemos que, si tienes el cabello muy largo y es invierno, lo recomendable para tu salud es usar el secador, pero si tienes el pelo corto o durante el verano, no necesitas usarlo.
  2. Calentador eléctrico vs. microondas. Si quieres calentar la leche o el agua, es mejor que uses un calentador eléctrico ya que permiten calentar una gran cantidad de líquido en poco tiempo. Por el contrario, el microondas necesita más tiempo y más energía, por eso está más indicado para calentar alimentos. Aun así, la mejor alternativa, si tienes tiempo, es calentar los líquidos en una cocina de gas, ya que es una de las energías que menos gastan.
  3. Aprovecha el calor residual. Cuando cocinas cosas a fuego lento. Aprovecha y apaga el gas o la vitrocerámica 5 minutos antes y aprovecha para que la comida se acabe de cocinar con el calor residual, ahorrando así 5 minutos de consumo energético.
  4. Plancha con vapor natural. Camisas de tejidos finos y con caída se pueden planchar de forma natural aprovechando el vapor de la ducha. También pantalones y trajes, siempre que el tejido no sea muy grueso, de este modo ahorras la energía de encender la plancha.
  5. La secadora solo para momentos puntuales. Lo más natural y que hará que tu ropa dure más tiempo es tenderla al aire libre. La secadora consume mucha energía y solo la deberías de usar en días de lluvia o urgencias.
ahorro energético Navidad

Ahorra energía esta Navidad

ahorro energético Navidad

Las fiestas de Navidad son sinónimo de luces, colores, guirnaldas, música y hermandad. Cada año las decoraciones navideñas llegan antes a las calles y a los comercios y esto supone un gasto extra de energía. Las luces de los árboles de Navidad, las guirnaldas luminosas y las decoraciones de la calle, todo suma e incrementa la factura de la luz. El año pasado en este artículo dábamos unos cuántos ejemplos de cómo practicar el ahorro energético, ahora apunta estos consejos y ahorra energía esta Navidad al máximo.

Evita la subida de la factura de la luz y ahorra energía esta Navidad 

El consumo durante la época de Navidad se produce no solo en el ámbito de las compras de regalos, también en el gasto de energía a consecuencia de las decoraciones lumínicas. Estos consejos os ayudarán a evitar sorpresas con la factura de la luz.

  1. Apaga las luces del árbol de Navidad y otras decoraciones durante la noche. A muchas familias les gusta dejar encendidas las luces para que se vea el árbol desde la calle. Esto consume mucho y es innecesario, así que nuestro consejo es que apagues las luces antes de irte a dormir.
  2. Desenchufa los electrodomésticos si te vas fuera de casa durante la Navidad. Muchas familias aprovechan los días de Navidad para visitar a familiares que viven en otras comunidades o países o simplemente hacen un viaje en familia a un destino lejos de casa. Es importante dejar todos los aparatos desenchufados para evitar que continúen consumiendo y también posibles cortocircuitos y otros incidentes.
  3. Aísla tu hogar. No solo en la época de Navidad, es imprescindible durante el resto del año para evitar que la calefacción consuma más de la cuenta porque el aire frío del exterior se cuela por las ventanas y puertas que no están bien aisladas.
  4. Aprovecha las tarifas reducidas de consumo. Muchas familias tienen contratada con su compañía eléctrica una tarifa de consumo reducido, esto significa que durante una franja horaria al día (normalmente entre las 10 de la noche y las 12 del mediodía) pagan menos. Así que lo más recomendable es que prepares las comidas y uses los electrodomésticos durante la Navidad en tu franja horaria de tarifa reducida.
  5. Instala un termostato. Este aparato te permitirá programar y controlar el uso de tus electrodomésticos a distancia, algo que potencia el ahorro energético.
  6. Instala sensores de movimiento. Se trata de un método que permite encender y apagar las luces según el movimiento de cada habitación. Así evitarás dejártelas encendidas, si no detecta movimiento, de forma inteligente se apagarán.
  7. Baja la temperatura del agua de tu caldera o calentador. Si dejas la temperatura al mínimo, se reducirá el consumo de energía.
  8. Saca los alimentos del frigorífico un poco antes de cocinarlos. De este modo podrás reducir el tiempo de cocción y consecuentemente también el uso de energía durante su cocinado.
depósito inercia

¿Qué son los depósitos de inercia?

Se acerca el invierno y con él, el frío. Las familias se preparan: Cambio de armario, de ropa de cama, puesta a punto de la caldera y los radiadores… Y también cada vez más frecuentemente las familias se preparan para practicar el ahorro energético y reducir la factura de la luz y el agua. Los depósitos de inercia son un elemento importante para ahorrar en calefacción durante las épocas más frías, te explicamos cómo usarlos.

¿Qué es un depósito de inercia?

Un depósito de inercia es un tipo de batería de energía que acumula agua que puede ser caliente o fría. Se usa normalmente con calderas, a pesar de que también se puede conectar a un generador de agua caliente, una caldera, energía solar, bomba de calor, estufa, frigorífico… Pueden ser de diferentes materiales:

  1. Acero.
  2. Acero inoxidable.
  3. Plástico.

Los depósitos de inercia consiguen que la caldera no suba a temperaturas elevadas, como, por ejemplo, las estufas de madera, y así acumula energía para utilizarla cuando se necesite en la vivienda. Es decir, la fuente de agua caliente o agua para la calefacción se conecta directamente al depósito de inercia en lugar de hacerlo al circuito de la calefacción.

Las ventajas de los depósitos de inercia: El ahorro energético

A grandes rasgos, estos depósitos consiguen una mayor eficiencia y reducen el consumo de combustible porque acumulan la energía o el calor residual. Con esto se consigue reducir la factura de la luz y del agua de forma considerable.

  1. Ahorro energético.
  2. Ahorro de consumo de agua.
  3. Ahorro económico.

Los depósitos de inercia son opcionales, pero se recomiendan en gran parte de las instalaciones, sobre todo en las que funcionan a baja temperatura y prácticamente obligatorias en las que contienen calderas de biomasa. Ahora que llega el frío es un buen momento para seguir un plan de ahorro e informarse sobre las diferentes opciones de calefacción al mercado de la climatización.

Los 5 electrodomésticos que más energía consumen


Lavavajillas, lavadora, nevera, microondas, aire acondicionado, televisor, el horno… Es difícil imaginarse la vida sin la ayuda de los electrodomésticos, que se han convertido en nuestra mano derecha en el hogar. Pero como todo en la vida, también tienen su parte negativa: El consumo energético se dispara y hace que la factura de la luz se incremente y también las emisiones perjudiciales para el medio ambiente. Te explicamos cuáles son los electrodomésticos que más energía consumen y cómo mejorar su eficiencia energética.

La importancia de la etiqueta energética


El primer paso para practicar el ahorro energético es comprar electrodomésticos que consuman lo mínimo de energía y contribuyan a tener cuidado del medio ambiente. Para conseguir este objetivo es imprescindible fijarnos en las etiquetas de eficiencia energética, unas pegatinas que señalan la cualificación energética según una escala que evalúa su consumo. Esta escala está formada por 7 letras, de la A a la G; la A es la mejor y la G la peor. 


En estas etiquetas también podemos encontrar información adicional como la capacidad útil de un congelador, la potencia de una secadora y el nivel de decibelios que produce el electrodoméstico en cuestión. Todo acaba definiendo el nivel de eficiencia y el ahorro en la factura de la luz del que te puedes beneficiar a medio plazo.


Además de la etiqueta energética son imprescindibles algunas buenas prácticas como el hecho de apagar totalmente los electrodomésticos. En este artículo ya explicamos cuál era el consumo de cada uno de ellos en stand bye.



Los electrodomésticos que más energía consumen


Un estudiodel Instituto para la Diversificación y el ahorro de la energía (IDAE) señala que más de la mitad del consumo energético de un hogar corresponde a los electrodomésticos.

  1. Nevera. Consume un 30% de la energía del hogar. Se recomienda no tenerla abierta mucho tiempo y evitar introducir alimentos muy calientes.
  2. Televisión y ordenadores. Consumen un 12% del total. Es mejor no dejarlos en stand bye.
  3. Lavadora. Consume cerca de un 12% del total. Se recomienda ponerla en marcha solo cuando esté llena de ropa y con programas en frío.
  4. Horno. Consume un 8,3% de la energía de un hogar. Se tiene que evitar abrir la puerta cuando esté funcionando, ya que cada vez que lo haces se pierde hasta un 20% de energía.
  5. Lavavajillas. Consume un 6,1%. Los consejos van en la misma línea que la lavadora. Programas en frío, cortos y ponerlo en marcha solo cuando esté lleno.

Ahorro energético durante las vacaciones

El mes de agosto es el preferido por la mayoría de empresas para hacer vacaciones. Son muchas las compañías que cierran puertas unos días o algunas semanas y casi todos los trabajadores hacen el grueso de sus vacaciones en agosto. Esto significa que muchos hogares se quedan vacíos durante esta época, a pesar de que las facturas de los servicios energéticos como el gas o la electricidad y el resto de suministros como el agua, llegarán de todos modos. Te damos algunos consejos para practicar el ahorro energético durante las vacaciones.

4 consejos para practicar el ahorro energético durante las vacaciones

La mayoría de personas creen que durante sus vacaciones el consumo de los suministros será más pequeño y así conseguirán pagar menos y ahorrar más energéticamente hablando. Pero esto no es del todo así, durante las vacaciones las cuotas fijas y los impuestos son los mismos, que básicamente representan la parte más importante de la factura. Por lo tanto, el ahorro monetario es mínimo; en cuanto al ahorro energético, si dejamos todo enchufado y conectado, aunque los aparatos electrónicos estén apagados, no conseguimos reducir el consumo. Apunta los siguientes consejos para practicar el ahorro energético durante las vacaciones:

  1. Corta la luz general de tu hogar. De este modo conseguirás que todos los aparatos electrónicos con conexión a la corriente queden totalmente apagados. Es una medida, no solo de ahorro, también de seguridad. Así evitarás que se produzcan cortocircuitos que provoquen un incendio, además practicarás el ahorro energético, ya que se ha demostrado que los aparatos enchufados y los que se quedan en modo stand bye, consumen energía.
  2. Si tienes que conservar alimentos en la nevera, desenchufa el resto de aparatos: Televisión, router, lavavajillas, lavadora, robot aspirador, ordenadores, etc. Es una manera de ahorrar energéticamente sin tener que vaciar la nevera (si solo te vas de vacaciones una o dos semanas, o simplemente quieres conservar alimentos en el congelador).
  3. Cierra la llave del gas. Si dispones de un calentador de gas evitarás incidentes y también ahorrarás porque la llama no tiene que estar constantemente encendida.
  4. Cierra la llave del agua. Te aseguras no encontrarte con una inundación al volver de las vacaciones y evitas que pequeños goteos o grifos erróneamente cerrados puedan incrementar tu factura del agua.
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El auge de la aerotermia

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¿Aire acondicionado sostenible y económico? Es posible con la aerotermia. Las nuevas tecnologías han avanzado y los progresos en el sector han permitido un impulso superlativo. Ya es posible disfrutar de todas las comodidades en casa cuidando del medio ambiente y también de tu bolsillo. La aerotermia permite aprovechar la energía del aire de la manera más limpia.

 

¿Qué es la aerotermia?

La industria de la climatización ha conseguido el equilibrio entre bienestar y respeto por el medio ambiente: Han creado la aerotermia, una nueva tecnología que aprovecha la energía del aire que hay en el ambiente. Una opción totalmente gratuita y sostenible de la que ya te hablamos en profundidad en este artículo.

La aerotermia también se puede usar con los equipos de calefacción y generación de agua caliente sanitaria, en estos casos a través de una bomba de calor inverter. Las bombas de calor son máquinas térmicas que extraen energía de un lugar para cederla a otro.

 

El funcionamiento de la aerotermia

Los equipos térmicos de aerotermia usan bombas de calor de tipo aire-agua a diferencia de los equipos tradicionales que hacen uso de bombas aire-aire. En el caso de la aerotermia, la maquinaria hace que el calor o el frío se ceda a un circuito con agua.

1. Modo calefacción y aire acondicionado: Se extrae energía del exterior (aire del ambiente).

 

La aerotermia: ¿Una energía renovable?

Como hemos explicado al inicio de este artículo, la aerotermia consigue que ahorremos en el consumo y es respetuosa con el medio ambiente. ¿Por qué? Este tipo de equipos cogen la energía del aire exterior y esto permite que el 75% de la energía que usan sea renovable y solo un 25%, eléctrica.

Tradicionalmente la aerotermia se usaba más en aquellos hogares donde no era posible la instalación de una caldera para conseguir calefacción y agua caliente. Con el auge de esta tecnología, se ha trasladado también a todas aquellas familias que quieren conseguir un aire acondicionado sin un consumo tan grande de electricidad.

Coste aire acondicionado

Cómo calcular cuanto cuesta el aire acondicionado

 

Coste aire acondicionado

La primavera se aproxima y es el momento ideal para empezar a mirar precios de aire acondicionado si es que queremos cambiar nuestro aparato o instalar uno por primera vez. Una de las dudas principales tiene que ver con el gasto que implica el uso de un nuevo electrodoméstico en casa, te explicamos cómo calcular cuanto cuesta el aire acondicionado y te damos algunos consejos para ahorrar en la factura de la luz.

 

Las variables del consumo de aire acondicionado

Es evidente que usar el aire acondicionado supondrá un incremento en nuestra factura energética en comparación con el uso, por ejemplo, de un ventilador, que es un electrodoméstico más pequeño, sencillo y con un gasto de energía mucho menor. Aún así, actualmente los aparatos eléctricos cuentan con etiquetas de eficiencia energética y la mayoría de los nuevos electrodomésticos que se venden en el mercado ya cuentan con niveles de eficiencia muy altos (el gasto eléctrico tiene un nivel bajo).

 

  1. Las etiquetas de eficiencia energética: Esta es una primera variable para calcular el coste del aire acondicionado, un aparato antiguo gastará mucho más que uno nuevo. Las etiquetas se clasifican desde la calificación A y B, que son las mejores y tienen un consumo de entre menos de un 55 y un 75% del gasto medio; hasta la G, con un consumo de energía superior al 120%.
  2. Tecnología inverter: Los aparatos más nuevos ya incluyen esta tecnología que permite mantener una temperatura de confort de manera estable, ya que se eliminan los ciclos de encender y apagar el aire acondicionado.
  3. Conciencia del gasto: Otra variable importante tiene que ver con la responsabilidad personal, existen toda una serie de trucos y recomendaciones para evitar gastos innecesarios.

-Mantener una temperatura constante de 21 grados, para evitar enfriar de golpe la habitación y que tengamos que apagar el aparato para después volverlo a encender al poco tiempo porque ya sentimos calor de nuevo. Esto dispara el consumo, también tener grados por debajo de los 21.

-Cerrar puertas y ventanas de la habitación donde esté el aire acondicionado para que se mantenga la temperatura y el aparato no tenga que trabajar el doble.

 

 

Cómo calcular el consumo de aire acondicionado

El consumo medio de un aparato de aire acondicionado es de unos 2 kilovatios la hora. A partir de aquí tendremos que hacer un cálculo aproximado del número de horas que está puesto en marcha durante un mes. Menos horas los días laborables y quizás unas poquitas más el fin de semana. Una vez que sabemos aproximadamente el tiempo que mantenemos encendido el aire, solo tendremos que multiplicar esta cifra por los 2.000 kilovatios y tendremos el total de KW que se consumen en un mes. Una cifra que también tendremos que multiplicar por el precio unitario de cada kilovatio.

Consumo cero

Edificios de consumo energético cero

Consumo cero

Desde el pasado 31 de diciembre de 2018 es obligatorio que todos los edificios públicos tengan un consumo energético cero y el resto se tendrán que adaptar para conseguirlo antes del año 2020. Se trata de una normativa europea relativa a la eficiencia energética de los edificios. Pero en la sociedad actual en la que vivimos, ¿estamos preparados para mantener este tipo de construcciones? Te explicamos qué son los edificios de consumo energético cero.


¿Qué son los edificios de consumo energético cero?

Se denominan edificios de consumo casi nulo de energía (EECN) a todas aquellas construcciones que usan el mínimo de energía posible para un correcto funcionamiento de los servicios energéticos del hogar como la calefacción o la luz. En el siglo XIX los edificios tenían únicamente una chimenea, que servía para calentar las habitaciones y cocinar. En el siglo XX los hogares se mecanizaron y reconvirtieron buscando la comodidad de los habitantes. Esto condujo a crear instalaciones mecánicas y al uso de energías contaminantes que inundaron la arquitectura sin tener en cuenta el impacto negativo sobre el medio ambiente. Ahora la relación de la arquitectura con el entorno está cambiando y en los proyectos arquitectónicos se tienen en cuenta estudios climáticos y el aprovechamiento de energías renovables.

Lo más importante de este tipo de edificios es que están diseñados para conseguir el mínimo consumo posible de energía sin perder el confort del que disfrutamos actualmente.

 

¿En qué consumimos energía?

Se tiene que dejar claro que el consumo de energía se produce por las acciones humanas, no por los edificios:

 

  1. Encender la calefacción cuando tenemos frío.
  2. Encender el aire acondicionado cuando tenemos calor.
  3. Calentar el agua para ducharnos.
  4. Iluminar los espacios interiores.
  5. Uso de pequeños y grandes electrodomésticos como secadores de pelo o la nevera.

 

Pero, ¿por qué tenemos que intentar consumir menos energía? Este consumo genera emisiones CO2 que son liberadas a la atmósfera provocando el efecto invernadero, algo que repercute en el incremento de la temperatura global del planeta. Emisiones que contribuyen al cambio climático que pone en peligro los ecosistemas que mantienen el equilibrio de la vida en la Tierra.


¿Cómo se consigue un consumo casi nulo de energía?

Los edificios se tienen que diseñar para tener una demanda energética reducida que se consigue aprovechando los recursos naturales como la radiación solar, la luz natural, el viento, el calor del suelo… Por lo tanto, el consumo energético de las instalaciones que se hagan en estos edificios y que tienen que ser altamente eficientes vendrán de fuentes de energía renovable a través de paneles solares, geotérmica, placas fotovoltaicas, etc.